Es inevitable, el invierno ya está aquí, y con él se vuelven a presentar las bajas temperaturas, clásicas en esta temporada del año. Y, si bien, hay quienes son fan de esta estación, seamos sinceros, a nadie le gusta pasar frío, menos si es dentro de su propia casa.
Paula Li, subgerente de ingeniería de Tecno Fast, hace hincapié en qué saber cómo funciona el calor en nuestros espacios es crucial para asegurar un invierno acogedor. En este sentido, lo ideal es preparar la casa y sus diferentes lugares para que la temperatura sea lo más agradable posible.
Lo primero es prestar atención a la infraestructura de nuestro hogar en lo que se refiere a aislamiento, pues este nos permitirá mantener un ambiente cálido. “Por ello, se debe verificar que todas las ventanas y puertas estén herméticamente selladas para prevenir cualquier fuga de calor. Si existen filtraciones de aire, una buena alternativa es utilizar burletes, sellos de silicona, o colocar una toalla enrollada”.
Otro importante punto a considerar, es la manera en que decidimos temperar nuestra casa. Lo principal es: “analizar las medidas del espacio a calefaccionar para así considerar la potencia y tamaño adecuado del artefacto”. Paula expone qué también se debe considerar si se utilizará calefacción a gas licuado o parafina. Lo “importante es tener una correcta ventilación” y evitar aquellas que producen mucho humo. Y por último, agrega: “poner alfombras donde pasas más tiempo puede ser una gran herramienta”, pues mantienen el calor en el suelo y aumentan la sensación de calidez. “Las cortinas gruesas también sirven para mantener el calor dentro del hogar durante la noche”.
Una de las prácticas que debemos realizar cada vez que se pueda, es aprovechar la luz solar. “En este sentido es clave abrir las cortinas y/o persianas durante el día para dejar entrar los rayos del sol, los cuales entregan calor natural a los diferentes espacios”. Esto se puede hacer en conjunto a la ventilación de la vivienda, la cual debe ser por lo menos dos veces al día durante 15 minutos, empezando el día y al llegar la tarde. No obstante esta se debe realizar independiente si hay sol o no.
Sumado a lo anterior, pero no menos importante, es crear el hábito de cerrar las habitaciones que no se están usando, esto reduce el espacio que necesitas calentar. Paula también hace énfasis en que no se debe secar ropa dentro de la casa. “Esto conlleva el aumento de humedad del ambiente, y puede generar problemas de mohos al interior de la vivienda y con ello enfermedades”.
Finalmente. solo nos queda invitarte a seguir estos consejos para hacer tu invierno mucho más cálido dentro de tu casa, y que no pases frío por los siguientes meses. Además, si vives con adultos mayores o eres uno de ellos, te recomendamos leer nuestra nota sobre los cuidados para este grupo etáreo, la cual encontrarás en la pasada edición de junio, así sabrás más detalles y para cuidar mejor aún la salud.
– Revista Melidatos